Servicios de La Raza

"Estaba entrando en una profunda depresión después de todo lo que pasó con COVID-19. Tuve que dejar de trabajar para cuidar de mis hijos, mi marido perdió horas en su trabajo y ya no sé qué hacer conmigo misma. Las clases fueron un desahogo para hablar con otras madres que estaban en la misma situación que yo y me ayudaron a tener más ideas sobre cómo hablar con mis hijos"

"Mis hijos están perdiendo interés en la escuela; no quieren conectarse ni participar. Pero veo que cuando llega la hora de entrar en Familia Adelante, siempre me recuerdan que es hoy y que me conecte. Les gusta la clase y me alegro de que así sea".

"Cuando me diagnosticaron el VIH pensé que mi vida había terminado. Mi autoestima estaba rota y me perdí en la depresión. Pensé que seguramente iba a morir y que perdería a mi familia y amigos porque ya no me aceptarían ni me querrían. Me encontraba sin familia ni apoyo alguno. Fue abrumador enfrentarme a mi diagnóstico y luego dar los pasos para averiguar cómo conectarme con los médicos, los medicamentos y más. La clínica me puso en contacto con Servicios, donde obtuve esa ayuda. Empecé a aprender sobre el VIH y a protegerme a mí misma y a los demás. Obtuve la ayuda que necesitaba para seguir estando sana, para vivir. El personal me mostró el amor, el afecto y el apoyo que necesitaba para seguir en esta lucha. No sé dónde estaría hoy sin ellos. “

Mi experiencia de prácticas en Servicios De La Raza fue una que llevaré cerca de mi corazón durante muchos años. Estos clientes son personas que a menudo se ven superadas por la falta de terapeutas de habla hispana y Servicios hace todo lo posible para llegar a estas personas y proporcionarles recursos. Sentí que era un aprecio mutuo - todos mis clientes estaban extremadamente agradecidos por tener tan buenos servicios y yo estaba tan agradecida por los clientes que me permitieron entrar en su mundo."

- Candidato a MA, Regis University 2019-2020